ÁRBITRO: Ortiz Blanco, del
colegio madrileño, auxiliado en bandas por Hinojosa García y Sánchez-Seco Otero.
Como dice el anuncio, posiblemente el mejor árbitro que ha pasado esta temporada
por el Municipal.GOLES:
1-0, min. 25. Córner botado por Dupi que NAVARRO cabecea a gol desde cerca de la
portería.
2-0, min. 50.
Dupi saca una falta desde el centro del campo, Richard centra de cabeza y RÁUL
IBÁÑEZ, tirándose en plancha, marca de cabeza.
INCIDENCIAS: Municipal de Tomelloso. Algo más de 900 personas, con menos
presencia de aficionados de Linares de la prevista. Tras el encuentro, Eduardo
Vílchez fue cesado como entrenador del Linares.
COMENTARIO: Actitud. Esa fue la palabra
clave del partido entre Tomelloso y Linares. La palabra que ambos técnicos
utilizaron para resaltar la diferencia entre los dos equipos, la diferencia que
le dio la victoria al equipo de Úbeda. Y es que en ese sentido el partido no
tuvo absolutamente nada que ver con lo que hasta ahora se había visto en el
Municipal. El equipo, sin hacer grandes alardes de técnica, no le perdió la cara
al encuentro en ningún momento, y eso le hizo llevarse los tres puntos.
El partido comenzó con un Linares con muchas ganas, pero nulo en cuanto a
acierto rematador. Los rojos, bien dirigidos por Tártara y con Cerveró muy
incisivo por su banda, crearon hasta tres ocasiones muy claras en los primeros
20 minutos de juego. Sin embargo, Silva, Aznar y sobre todo Bordi se mostraron
tremendamente fallones, con una falta de puntería alarmante para un equipo con
las pretensiones con las que partía el Linares.
En fútbol se dice que el que perdona, lo paga, y el Linares no le hizo un feo al
tópico. En el minuto 25, un preciso córner de Dupi lo remataba a gol Navarro,
dejando bastante tocado al Linares. El Tomelloso había comenzado con poco
control del centro del campo, y por consiguiente con muchas llegadas visitantes
a su área. Pero a partir del 1-0 las cosas cambiaron, y el equipo local comenzó
a ganar presencia en el partido.
El descanso llegó, y a los 5 minutos de la segunda parte lo hizo el 2-0, gracias
a una jugada ensayada del Tomelloso. Algo impensable hasta hace un mes, cuando
las jugadas ensayadas brillaban por su ausencia. Ese gol hundió definitivamente
al Linares, que no existió en lo que quedaba de partido. Las entradas de tres de
los refuerzos invernales no aportó nada a un equipo claramente con el ánimo
tocado.
El público disfrutaba, y jaleó la salida a calentar de Baba Sule, nuevo ídolo
local antes de debutar. Los aplausos crecieron cuando el ghanés debutó, aunque
lo poco que entró en juego no le permitió lucirse. Aun así, al término del
partido Baba Sule le devolvió los aplausos al público. En definitiva, mucha
alegría en Tomelloso y la permanencia, que hace poco parecía dificilísima, ahora
se toca con la punta de las manos.
JGC |