COMENTARIO: Se rompió la buena racha del Tomelloso, que contaba por victorias sus partidos en casa de la segunda vuelta. El equipo que lo consiguió fue el Jaén, uno de los mejores que han pisado este año el Municipal, liderado por un jugador, el sevillano Navarro, que demostró estar muy por encima de la media de calidad de la categoría.

El partido comenzó con un juego muy trabado, sin grandes jugadas ni ocasiones. Sorprendió el planteamiento inicial del Tomelloso, con Baba Sule como media punta, Raúl de extremo izquierdo y Pinto por la derecha. Tres jugadores fuera de sitio, dos de ellos en puestos en los que nunca habían jugado antes en el Tomelloso. El experimento salió mal, en realidad muy mal. El bagaje ofensivo del Tomelloso en la primera parte fue nulo, sin un tiro a puerta que echarse a la boca.

Mientras, Navarro hacía de las suyas en el Jaén. El media punta, que fue jugador del Manchego en los 90, era la principal fuente de ocasiones de gol para los morados. Sus pases sobre David Gallo fueron lo más peligroso de los primeros 90 minutos, que se convirtieron casi en un monólogo de los andaluces ante la peor versión del Tomelloso como local en la era Úbeda.

Menos mal que en la segunda mitad cambió la decoración. El míster retiró a Raúl, perdido en la banda, y sacó a Navarro, situando a Cabezas de lateral, Novillo de medio derecho y Pinto de medio zurdo. Una situación más racional que repercutió positivamente en el rendimiento del equipo. Aunque, eso sí, el dominio territorial correspondía todavía al Jaén. El Tomelloso, mientras, se permitía, ahora sí, tener alguna ocasión para abrir el marcador.

En el minuto 70, Pablo Lozano se retiraría con una contractura. El bravo ariete alcarreño no estaba para jugar los 90 minutos después de un mes parado y a falta de 20 tuvo que ser sustituido. Al no quedar delanteros en la convocatoria, Úbeda optó por sacar a Cobo, colocarlo en la izquierda, y jugar con Pinto y Dupi como medias puntas a falta de delanteros centros. Baba Sule pasó al doble pivote junto a Juli, y demostró definitivamente que es ese, y no otro, su puesto en el campo.

En los instantes finales, el Jaén decidió que no se podía perder el empate conseguido y pasó a contener sus ansias atacantes. El Tomelloso lo aprovechó para volcarse en la meta del muy seguro Jacobo Sanz. Así, en el descuento Novillo tendría en sus botas una buena ocasión para el 1-0, pero la desaprovechó. Así que empate final, que al Jaén le mantiene en zona de Copa pero hace que casi se olvide de jugar el play-off. Y que al Tomelloso le mantiene, una semana más, en el 15º puesto, sin terminar de alejarse de la zona de peligro.

JGC